miércoles, 22 de septiembre de 2010

Felipe nos manda su reseña de Santa Elena

Final Nacional Santa Elena Huasca de Ocampo Hidalgo 12/Sep/10

Me anime a participar en la final debido a que Diego estaba en 5º lugar del ranking nacional, logrando remontar al 4º , pero la crisis le pego a los organizadores ya que solo premiaron al campeón , subcampeón y por ser buena onda al 3º olvidando al 4º y 5º que en por lo menos los últimos 7 años si otorgaban trofeos hasta el 5º pero en fin, así es como motivan para seguir en los nacionales, de la carrera debo destacar la excelente organización de la familia Campuzano, por ser fecha UCI nos dividieron en 4 grupos de arranque, puntuales a las 8:00 los elite y sub-23, 11:00 master, avanzados y principiantes, 13:00 expertos y a las 13:30 infantiles, ahora sí me dio tiempo de apoyar a Diego en una pista ovalada y corta quedando en 5º lugar. No reconocí la pista por que preferí conocer Huesca pueblo mágico, los prismas basalticos y la peña del aire, me confié por que los lobos me dijeron que era casi igual a la del año pasado y efectivamente así fue, la pista casi en su totalidad se llevo en bosque, arranque en 1º lugar pero al comenzar la subida sentí los estragos del cansancio por lo que le baje al ritmo pues tenia que dar 3 vueltas, y fui rebasado por los de mi categoría, trate de aguantar su paso en la subida pero no lo conseguí, mi estrategia fue aplicarme en la bajada que tenia su grado de dificultad (single track en forma de “s”), luego siguió una subida pesada corta para continuar con la misma pero tendida para entrar a una bajada con un buen grado de inclinación, raíces, escalones y aquí fue mi 1ª caída la cual sí me aflojo y perdí tiempo y confianza, ya que me volví a caer un par de veces más en un single track con escalones y un árbol al cual bautizaron como la guillotina, si no te agachabas dejabas tu rostro en la rama, después venia la ultima parte de la pista para llegar a la meta y a dar la 2ª y 3ª vuelta para finalizar en 5º lugar; Felipe jr. también se llevo su recuerdo del nacional, abollo un árbol con su rodilla y se le desvío el manubrio ligeramente pero así se hecho su vuelta terminando en 7º. En esta ocasión el campamento puma estuvo pequeño. Solo 3 corredores y 2 porristas, pero con la misma esencia, llegar a un lugar donde descansar y tener que comer e hidratarte, gracias a mi esposa Alicia y mi hija Vanessa por ese apoyo, bueno están por terminar las carreras solo quedan 3, la popobike, 5ª del DF y la macabrona por lo que no hay que dejar de entrenar espero ver a mas pumas en esas carreras SALU2

miércoles, 15 de septiembre de 2010

miércoles, 8 de septiembre de 2010

martes, 7 de septiembre de 2010

Reseña de Isaac de la carrera en los Dinámos

Los dinamos, es encuentran en la delegación Magdalena Contreras al sureste del Distrito Federal y el lugar es conocido porque todo el año corre un río vivo.
La preparación para la competencia empezó desde ocho días antes de la carrera, cuando se convocó a reconocer la pista el sábado 28 de agosto, (Juan Carlos, Luis Carlos, Abraham, Oscar, Fernando y Yo “Isaac”) una pista que empezaba en subida pedregosa con una pendiente bastante pesada que duraba un par de kilómetros, y que después de sufrir se llegaba a una intersección con dos caminos uno de bajada y otro con más subida que ocho días después sería nuestro calvario.
Al llegar a la intersección bajábamos por camino ancho para después llegar a una represa para cruzar del otro lado del cerro y tomar un single track bastante angosto pero muy divertido con bajadas y subidas, cruces de pequeños riachuelos piedras escondidas a varios nos agarraron de sorpresa y nos mostraron como ven las hormiguitas desde el piso. Después del single track llegábamos a una camino desvarrancado que sólo caminando, pisando con mucho cuidado y la bici a la espalda se podía pasar, para continuar con el single track pero ahora con un poco más de grado de dificultad porque a pocos centímetros pasábamos de la orilla del cerro además que había un poco más de lodo, hasta que en un árbol los punteros del grupo vieron unas flechas que indicaban que teníamos que bajar por una ladera bastante empinada y con escalones y al parecer hace mucho tiempo era un pista de downhill porque metros más delante había una rampa. Varios bajamos al lado de la bici para evitar accidentes ya que el lodo era como agua con jabón con escaleras y una declinación bastante grande y camino angosto. Protegidos sólo por la vegetación de llegar a una caída segura al abismo en caso de quedarse sin frenos y que duraba al rededor de 10 min. para después salir a una parte de la carretera que llega al cuarto dinamo y llegar otra vez a la meta.
Pues con esa imagen de la pista nos fuimos a nuestras casas y con planes de entrenamiento distinto pero con un sólo objetivo, agarrar y aguantar la subida de un poco más de dos kilómetros para ser de los primeros en llegar a la parte desvarrancada y tomar la bajada sin tanta gente que ocasionara una catástrofe de caídas, al menos eso fue lo que yo planee.

En el transcurso de la semana los organizadores mandaron un comunicado haciéndonos saber que parte de la pista había cambiado y modificado la llegada a la meta debido a que toda las semana llovió y había dejado en muy malas condiciones la bajada. Para ese día yo ya estaba en un plan de entrenamiento a base de 1 hr. de natación diaria con una alimentación balanceada y con mucha pero mucha fruta y verdura, sin dejar de lado las proteínas y cereales. Y para un día antes de la competencia rodar ligeramente en montaña para acostumbrarse a las piedras y relajar músculos.

El domingo a despertarse temprano para bañarse desayunar y montar las bicis, mi mamá y mi papá nos prepararon el desayuno para llevar, mientras mis hermanos se despertaban y yo preparaba lo necesario para la competencia agua, herramienta, cámara de refacción, casco, guantes, ropa seca por si acaso me mojaba, etc.

Tomamos con tranquilidad el arribo a los dinamos ya que como hacía frío y estaba lloviendo pensamos que no habría tanta gente que subiera, porque en días muy soleados y sin lluvia los dinamos se convierten en un lugar muy concurrido por la gente cercana y no tan cercana. Imaginandonos lo peor del caos vial para entrar a la carretera que nos lleva al cuarto dinamo, tomamos unos atajos que anterior mente nos habían enseñado los lugareños ya que mi familia y yo vamos a los dinamos con frecuencia.

Una vez ya en el cuarto dínamo, estaba una ligera lluvia pero en tan solo cinco minutos empapó my chamarra quedándome por un rato muy mojado y desde ahí supe que durante toda la competencia íbamos a tener un clima adverso. Una vez desmontada y estacionada la bici en el super rack de Felipe(deberías patentarlo) pasé a saludar a todos ya instalados con la carpa, ahí se encontraban: Felipe, Pinpín, Diego, Luis Carlos, Juan Carlos, Tonalli, Mauricio, Ricardo y Xavier Rubio (más tarde llegarían Juan Pablo , Hugo, Víctor Ortiz, y Fernando).

Mientras llovía cada vez más fuerte los pumas empezaron a armar la segunda carpa del equipo, para esto hubo una lluvia de números del uno al siete porque al parecer trataban de seguir el instructivo de la otra carpa que obviamente no funcionó, pero porfín y no sé como, se pudo levantar la segunda carpa puma para extender el campamento y podernos tapar mejor de la lluvia.

La carrera se tuvo que aplazar treinta minutos, al parecer por la lluvia y el frío, 12:30 p.m. cuando llamaron a formación a la categoría de Diego cuya pista era como la versión mini de la de los mayores, una subida espantosa y después bajar por el mismo camino pero más angosto. Mientras eso se llevaba a cabo; Luis Carlos, Hugo, Tonalli, Juan Carlos, Juan Pablo, Fernando y yo nos fuimos a calentar, agarrando parte de la carretera de bajada y de regreso hacia la meta, en total fueron 2.38 km de calentamiento con mucha cadencia para preparar a los músculos de la subida tan desgastante. Al momento de la llamada a formación ya estaba Juan Pablo y Tonalli dentro de los primeros lugares para arrancar. Detrás de ellos en el segundo grupo estábamos Xavier, Ricardo, Luis Carlos, Fernando, Hugo, Juan Carlos, Pinpin, Felipe, Víctor Ortiz, Mauricio y yo.

Al momento del arranque del primer grupo se vio que les costaba arrancar, ya que como estaba de de subida a más de uno se escuchaba que rompían cadena. Pero al arranque del segundo grupo todavía fue más caótico de lo pasado, porque éramos unos cuantos más que el primer grupo y algunos menos experimentados entorpecía la circulación, y otros se nos atoraba el tiro de la lycra con la punta del asiento, cerrándoles el camino a otros “lo siento Felipe”. En fin... a los pocos metros de arrancar vi que mis compañeros le metían con mucha galleta a la subida que apenas empezaba y decidí bajarlos de revoluciones porque de seguir así no llegarían enteros a la intersección en donde ya empezaba la bajada.

Hay por la n-ésima subida alcancé a Tonalli y seguía su ritmo aunque por momentos el se revolucionaba demasiado imaginando que ya estaba desesperado por la subida tan exigente y volvía a una cadencia más baja. Y fue entonces que le dije que aguantara un par de subidas más para después bajar lo más rápido posible, pero no fue así cuando llegamos a la mencionada intersección que cuando alce la vista se veían varios monitos pedaleando sobre una pared de piedras y suelo mojado y lleno de lama. Entonces en el pequeño descanso que nos daba la topología del lugar decidí ir despacio y que las piernas se refrescaran lo mejor posible para subir aquella pendiente tan empinada y técnicamente complicada por el lodo y lama.

Así seguía de complicada, desgastante y muy tediosa subida al punto que algunos corredores se escuchaban que mentaban madres por la subida tan pesada que nadie se imaginaba “ni los que ocho días antes habíamos ido a correrla”, al fin se vio una bajadita pero que no duraba mucho, apenas para refrescar y darle descanso a las piernas y después la partida final, una subida de tres tramos con una pendiente espantosa con lodo piedras, lama y mucha lluvia, que varios para no reventarlos las piernas en la primera vuelta decidimos caminar para controlar nuestra respiración y bajar de pulsaciones. Para este entonces ya nos había llovido como 10 veces y la ropa ya hasta escurría agua.

Ya llegó por la que lloraban... un ciclista nos avisó después de aquel tramo tan técnico y sufrido que nos esperaba una bajada continua hasta la meta y así fue, no antes de que la bajada tan socorrida por todos cobrara de las suyas por la cantidad de agua y lodo que bajaba en ella y las curvas tan cerradas y pendiente muy constante que en combinación ha varios se quedaron sin frenos (ya sean v-brake, de disco o de pie) aún con frenos hacía que desarrollaras mucha rapidez en pocos metros y que antes de llegar a la meta frenaras hasta con las vallas de contención “¿no es así Ricardo?” para llegar a meta y empezar de nuevo al calvario.

Ya en mi segunda vuelta alcance a una puma que traía uniforme de rutero y me pasó un ciclista de la categoría “intermedio” y aunque ya no lo pude rebasar al inicio de la subida, lo alcance ya casi para llegar al inicio de la bajada al igual que el puma rutero. Bajé con todo, plato grande adelante y cinco o seis atrás porque había zonas de lodo que te frenaban y no podías salir si no traías un paso más ligero, eso sí regulando mi frenada para que no fuera tan rápido pero no tan lento (una velocidad promedio de 27-30 km/hr en la bajada), hasta que llegó una curva al final de una recta muy rápida que no me dio tiempo de cambiar a un paso más ligero y me fui a hundir a un lodazal hundiéndome casi por completo y perder segundos valiosos, hasta que me pasó el pumas rutero y se dio a la fuga y aunque baje todavía más rápido en la segunda vuelta ya no pude alcanzarlo porque él bajaba como Kamikaze y me tuve que conformar con el 5to. lugar.

Pero aquí no acaba... más adelante a Tonalli se le descompuso el freno trasero y tubo que ir a la carpa para pedir otra bici que lo subiera y lo bajara con seguridad para acabar. Mi bici era la única que estaba disponible porque a todas las demás se les acabaron los frenos y quedaron igual que la de Tonalli, así que de nuevo subió y bajo sin ningún problema en toda su mecánica dándole el último empujón para completar sus vueltas.

En resumen... una pista muy divertida, sufrida y accidentada, llena de lodo de pies a cabeza al igual que nosotros, que después gracias al río que corre ahí nos ayudo en buena parte a quitarnos los 10 kilos de lodo que habíamos agarrado y a compensar nuestra temperatura por lo fría que estaba.

Lugares Obtenidos:

Dieguito: 3ro.
Pinpín: 1ro.
Tonalli:
Isaac Pompa: 5to.
Juan Pablo: 2do
Luis Carlos: 1ro.
Hugo:
Víctor Ortiz:
Juan Carlos:8º
Felipe: 5to.
Xavier: 14º
Ricardo: coucheo
Mauricio: 4to.
Fernando:

Nota: Faltaron algunos lugares por mencionar pues no han publicado los resultados oficiales.